AUTOTRANSFUSIÓN EN PEQUEÑOS ANIMALES: UNA REVISIÓN NARRATIVA

Resumen

La terapia de transfusión tiene como objetivo administrar los componentes sanguíneos faltantes y, en consecuencia, aumentar la capacidad de transporte de oxígeno en la circulación sistémica. La transfusión de sangre se puede realizar de forma convencional alogénica o autóloga, cuando se utiliza sangre del propio paciente, que se reintroduce en el organismo por vía intravenosa. La autotransfusión suele estar indicada para pacientes que experimentan hemorragia interna o grave y/o que necesitan someterse a procedimientos quirúrgicos de emergencia. En pacientes veterinarios, la fuga de sangre hacia las cavidades torácica o abdominal se ha atribuido a lesiones vasculares causadas por traumatismos, torsión de órganos, neoplasias rotas o coagulopatías. Este trabajo recopila información sobre la autotransfusión en pequeños animales, enumerando las principales indicaciones y las diferentes técnicas descritas para su realización. La transfusión autóloga se divide en dos categorías: la autotransfusión de emergencia, donde se recolecta, filtra y reinfunde la sangre perdida en las cavidades, y la autotransfusión predepósito, que consiste en la donación preoperatoria de la propia sangre del paciente, que se recolecta y guarda para un período de tiempo antes de la cirugía, y se reinfunde durante el procedimiento quirúrgico o hemodilución preoperatoria, que implica la donación autóloga inmediatamente antes de la inducción anestésica, seguida de la infusión de líquido cristaloide para mantener el volumen de sangre y la sangre se transfunde nuevamente al paciente cuando surgen indicaciones de transfusión o antes el final del procedimiento. Para la recolección de sangre de la cavidad, se pueden adoptar las técnicas de aspiración directa y aspiración quirúrgica. Los autores de este trabajo utilizan la aspiración directa con la ayuda de una jeringa de gran calibre y bolsa de transfusión. La principal ventaja de utilizar la autotransfusión es la pronta disposición de la sangre sin necesidad de pruebas de compatibilidad, por lo tanto, en el momento de la transfusión se puede administrar la sangre en bolos, sin causar ningún tipo de riesgo para el paciente, haciendo que la transfusión sea mucho más rápida y eficaz. más efectivo. Con base en la literatura científica sobre la autotransfusión, se puede afirmar que es una alternativa segura, efectiva y económicamente viable para ser realizada en la rutina clínica de pequeños animales. En la experiencia de los autores, es una técnica sencilla de realizar y este informe es una importante contribución a la información disponible en la literatura científica.