CALIDAD ÓSEA DE PONEDORAS COMERCIALES ALIMENTADAS CON PIENSOS ADICIONADOS CON DIFERENTES ACEITES VEGETALES.

Resumen

Este experimento, con 112 días de duración, fue realizado con el objetivo de estudiar el efecto de la adición de aceites vegetales, fuentes de ácidos grasos omega 3 y omega 6 en el pienso, sobre la calidad ósea de ponedoras comerciales livianas. Fueron utilizadas 50 ponedoras comerciales blancas de linaje Lohmann LSL, sometidas a 10 tratamientos experimentales (T1 – Control; T2 – inclusión de 2,5% de aceite de linaza en el pienso; T3 – inclusión de 2,5% de aceite de canola en el pienso; T4 – inclusión de 2,5% de aceite de soya en el pienso; T5 – inclusión de 5% de aceite de linaza en el pienso; T6 – inclusión de 5% de aceite de canola en el pienso; T7- inclusión de 5% de aceite de soya en el pienso; T8 – inclusión de 2,5% de aceite de linaza +2,5% de aceite de soya en el pienso; T9 – inclusión de 2,5% de aceite de canola + 2,5% de aceite de soya en el pienso y T10 – inclusión de 2,5% de aceite de linaza + 2,5% de aceite de canola en el pienso). Las características evaluadas fueron: resistencia ósea a ruptura y densidad mineral ósea. A través del análisis histológico de las tibias, se realizaron los conteos de osteoclastos y se midió la espesura del hueso compacto y el área ocupada por el hueso esponjoso. El diseño experimental utilizado fue completamente aleatorio, con 10 tratamientos (diferentes inclusiones de lípidos), siendo 5 repeticiones (tibias) por tratamiento. Los datos obtenidos fueron evaluados a través de análisis de varianza. Se confirmaron efectos significativos sobre las epífisis proximal, distal y diáfisis de las tibias debido a la inclusión de aceites vegetales en el pienso de ponedoras comerciales. El uso de aceites vegetales en el pienso de ponedoras trae consigo un detrimento en la retención de minerales en los huesos, sin embargo, esta disminución puede ser controlada cuando se usan cantidades elevadas de aceites ricos en ω-3. El uso de ácidos grasos poli insaturados ω-3 y ω-6 en el pienso de ponedoras no tuvo influencia en la formación y reabsorción de tejido óseo.